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Cuernavaca, Mor. El gobernador de Morelos, el morenista Cuauhtémoc Blanco Bravo, negó tener nexos con la delincuencia organizada, como lo denunció Uriel Carmona Gándara, fiscal de Morelos antes de ser detenido el pasado viernes, -y negó también ser responsable de la detención de éste-, sino que la detención de Carmona obedeció que en la Fiscalía General del Estado, cambiaron el dictamen médico forense de Ariadna Fernanda víctima de feminicidio en la Ciudad de México.
El mandatario estatal señaló que no es ningún “perseguidor”, “ni un asesino”, ni “mandó” a balear las instalaciones de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Morelos, ni las instalaciones de un medio de comunicación (el xhoro matutino), del cual sus titulares de dicho programa de radio trabajaron en el ayuntamiento que encabezó Blanco en el ayuntamiento de Cuernavaca (2015-2018) en el área de Comunicación Social, porque, reiteró, que no tienen necesidad de hacer esas “barbaridades”, ni “salvajadas”.
Y confió que ahora sí el fiscal metropolitano, Carlos Andrés Montes Tello, que suple en funciones a Carmona Gándara, identifique a los responsables de los ataques en los inmuebles ubicados en la capital.
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