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Washington. El estado de Washington y la ciudad de San Francisco prohibieron este miércoles la organización de eventos masivos para prevenir una mayor propagación del coronavirus en el territorio estadounidense.
En Washington, epicentro del virus en Estados Unidos con 268 casos y 24 fallecimientos hasta ahora, el gobernador Jay Inslee vedó eventos con más de 250 personas en los condados de King, Snohomish y Pierce.
La estricta prohibición incluye eventos deportivos, musicales y religiosos, incluidos festivales, conciertos y desfiles.
“Está claro que nuestro estado necesita una posición más vigorosa, exhaustiva y agresiva si vamos a frenar la propagación de esta epidemia”, dijo el gobernador.
La limitación estará en vigor en principio hasta finales de marzo, pero es “muy probable” que se extienda, precisó Inslee.
La alcaldesa de San Francisco, London Breed, explicó que la prohibición de eventos con más de mil personas era “un paso importante para apoyar la salud pública”.
La medida, que durará inicialmente dos semanas, sigue una orden similar en el condado de Santa Clara, en el norte de California, que entrará en vigor el miércoles y obliga a cancelar reuniones también de mil o más personas en espacios cerrados durante las próximas tres semanas.
El estado registra hasta ahora 157 casos de coronavirus, informó el gobernador Gavin Newsom.
Los equipos deportivos de la región se movilizaron para cumplir con las medidas. Breed dijo que el equipo de baloncesto Golden State Warriors le expresó que “apoyaban” los esfuerzos.
Los Warriors anunciaron poco después que cerrarán su cancha al público en el partido del jueves ante Brooklyn Nets.
Los Marineros de Seattle emitieron un comunicado poco después de las declaraciones de Inslee diciendo que buscarían reprogramar los primeros juegos de la temporada de béisbol 2020, que debe comenzar el 26 de marzo.
“Aunque esperamos volver a jugar al béisbol en Seattle lo antes posible, la salud y la seguridad de nuestra comunidad es lo más importante”, indicó el equipo en un comunicado.
El gobernador Inslee señaló que otros condados podrían sumarse a la medida en los próximos días.
“Este es un virus que, según los expertos, es potencialmente diez veces más letal que la gripe y eso exige una respuesta coherente con la naturaleza de la amenaza”, insistió el gobernador, consciente de que “cientos, o incluso miles de personas más”, están en las calles “tal vez sin siquiera saber que tienen el virus”.
Al menos 19 de las muertes en Washington están vinculadas con Life Care Center, un ancianato en el condado de King, el más afectado por la crisis.
Estados Unidos suma en total mil un casos y 31 muertos, según los Centros para el Control de Enfermedades (CDC).
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