La secretaria de Salud (Sedesa) del gobierno capitalino, Oliva López Arellano, señaló que en la fase 3 de la pandemia de covid-19, cualquier persona que se sienta mal, aunque no sea por síntomas respiratorios, puede ser portadora del virus, y si tiene enfermedades de comorbilidad podría tener “el peor pronóstico” al llegar a un hospital.
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Por ello, comentó que la dependencia a su cargo ha dado el equipo necesario para proteger al personal de salud, además de capacitarlos y aplicar los protocolos precisos con el fin de que no se contagien. Agregó que la mayoría de los contagios del personal médico no se han dado en los hospitales, sino desde algún familiar.
En videoconferencia, la funcionaria fue cuestionada por Apro sobre casos de pacientes que llegan a hospitales de la red de salud pública de la Ciudad de México por padecimientos de otras enfermedades, pero a las pocas horas de ser ingresados fallecen por “neumonía atípica”, como ocurrió ayer en el hospital Rubén Leñero. Así respondió:
“En esta fase 3, la propagación del virus es muy intensa y hay muchas personas que están infectadas y lo desconocen, lo desconocemos. Esto significa que cualquier persona que se sienta mal o que incluso esté en un centro de salud o que tenga alguna expresión patológica distinta aparentemente no compatible o no expresiva de covid, puede tener la enfermedad, y eso está ocurriendo”.
Agregó: “Lo que señala de la paciente, sabemos que el covid está acelerando los síntomas y se hace una sinergia muy negativa, sobre todo con diabetes, con hipertensión y con obesidad. Entonces, tienen el peor pronóstico, se expresan los peores momentos de la enfermedad y seguramente algo así ocurrió con esta paciente”.
Protección y protocolos “en todos” los hospitales
La titular de Salud insistió que la dependencia ha hecho “un esfuerzo muy importante” para dotar de equipo de protección personal en todas las áreas de urgencias a médicos, enfermeros y camilleros, “porque en este momento cualquier persona que se acerque a un hospital puede tener la infección de covid-19”.
Añadió: “En todos los hospitales, como estamos en fase 3, ya se tienen los protocolos por si hay alguna sospecha, se aísla al paciente y se tiene un trato específico”.
Hasta el momento, en la Sedesa ha habido 13 fallecimientos de personal y hay 160 empleados infectados. “Sabemos que tenemos 30 mil trabajadores, entonces en términos de tasa, es una tasa relativamente baja”, explicó al respecto.
La funcionaria también fue cuestionada sobre las muertes de una doctora y un trabajador de limpieza del Hospital Pediátrico de Iztacalco, además de otra médica que está en aislamiento por estar contagiada del virus.
“Hay que señalar que son 30 mil trabajadores en la Secretaría de Salud. Por supuesto, con este momento de circulación generalizada del virus hay brotes comunitarios familiares”, reiteró.
Además, apuntó, hay contagios en otras unidades del sector donde muchos de los médicos, enfermeros y personal en general trabajan, y también lo hacen en el gobierno local. Por ello, añadió, “en este momento, por la propagación del virus, es muy difícil saber dónde se infectaron”. No obstante, explicó que en los estudios que han hecho entre el personal afectado, en la mayoría fue por “un brote familiar”.
López Arellano detalló que cada que se detecta un caso de contagio entre el personal se hace un estudio epidemiológico, se toman las muestras necesarias a quienes tuvieron cercanía directa con la persona infectada o fallecida para controlar la aparición de los demás pacientes con covid-19.
De igual manera, comentó que el personal sabe que si tiene algún síntoma debe reportarlo a sus superiores y aislarse de inmediato hasta descartar la patología.
La titular de la Sedesa sostuvo que reforzarán la capacitación del personal y la entrega de equipos de protección para proteger al personal de salud. “Estamos monitoreado en todos los hospitales y con la Secretaría de la Administración y Finanzas para reponer el equipo y que no falte nada”, finalizó.
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