*La falta de educación ambiental y la ausencia de gestión gubernamental han provocado que se eleve la generación de residuos solidos…
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La falta de educación ambiental y la ausencia de gestión gubernamental han provocado que se eleve la generación de residuos solidos. Cada día un mexicano tira en promedio 1.2 kilogra- mos de basura; y aunque gran parte de los desechos se pueden reciclar, terminan en rellenos sanitarios y en tiraderos a cielo abierto, sobre todo en Chiapas y Oaxaca, los estados más pobres del país.
El gobierno federal pone poca atención a la generación de basura. Este 2017 el programa de residuos sólidos urbanos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) careció de presupuesto, aunque el año pasado contó con alrededor de 2 mil millones de pesos que se destinaron a apoyar a los gobiernos estatales y municipales para el desarrollo de programas. La dependencia impulsó en 2014 el programa especial de producción y consumo sustentable, que tampoco tiene recursos oficiales para su operación.
Cada estado debe contar con estrategias de tratamiento de desechos que requieren manejo especial –como los electrónicos o biológico infecciosos–, pero pocos han cumplido. Es el caso de Quintana Roo, Nuevo León, Aguascalientes y Querétaro, explicó Daniela Méndez, experta en el tema.
Del total de municipios del país (2 mil 457), en 2 mil 266 hay servicios de recolección de basura, pero sólo en 104 hay estudios sobre la generación y no hay análisis respecto de la composición de los residuos, de acuerdo con información estadística de la Semarnat.
Debido a que la dependencia no dio la entrevista solicitada sobre el tema, se obtuvo la información a partir de reportes de distintos años.
En el Informe de medio ambiente 2015 se refiere que ese año se generaron 53.1 millones de toneladas de basura al día. Esto es, un incremento de 61.2 por ciento respecto a 2003. Este dato contrasta con que el volumen de material reciclado apenas llegó a 9.6 por ciento del total, mientras en países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) el porcentaje crece radicalmente: va de 24 a 58 por ciento.
Estado de México, Ciudad de México (CDMX) y Jalisco concentran 33 por ciento del volumen de basura generado en el país. Todas las entidades, excepto CDMX, tienen rellenos sanitarios para depositar los residuos. Los desechos de esta entidad se disponen en cuatro sitios en el estado de México: La Cañada, Cuautitlán, El Milagro y Tepozotlán y uno en Cuautla, Morelos. Las entidades con más sitios de disposición final de basura son el estado de México, 28; Jalisco. 27; Veracruz y Chihuahua, con 18 cada uno.
Para los expertos, la solución al problema de la basura no son los rellenos sanitarios –los cuales deben tener una tecnología especial para evitar la filtración de contaminantes al subsuelo–, pues inutilizan en forma irreversible el sitio que ocupan, generan fauna nociva y se convierten en fuente de contaminación para el aire, la tierra, los cuerpos de agua superficiales y subterráneos, indicó Sergio Palacios, del Instituto de Geología, de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Agregó que se habla de que rellenos sanitarios tecnificados
son la solución para la disposición final de la basura, pero tienen un elevado costo de construcción y manejo, así como una vida útil limitada, significan una salida costosa y no definitiva al problema de la basura.
Pero aun con los rellenos sanitarios, unas 27 mil toneladas de basura al día terminaban en sitios no controlados, lo que equivale a 21 por ciento del total, en 2012. Hace cinco años había mil 221 tiraderos a cielo abierto, en Oaxaca, 114, y en Chiapas, 101. Se trata de los estados con más precipitaciones pluviales del país. En un basurero de este tipo los lixiviados de basura se van al subsuelo en forma directa y contaminan los mantos freáticos, el agua, sostiene Palacios.
Explicó que productos de uso cotidiano como los focos ahorradores, que fueron promovidos por el gobierno federal para reducir el gasto de energía eléctrica, tienen mercurio y terminan en la basura, no hay regulación sobre su manejo.
La legislación no se cumple, las empresas no invierten en el manejo de los residuos, es un costo adicional al costo de producción, pagar a una compañía para que recolecte y maneje los desechos es un costo, pero no quieren destinar recursos para ello
, señaló en entrevista.
Consideró que los gobiernos ponen poca atención al tema, por ejemplo, hay hospitales y clínicas que no contratan los servicios de empresas certificadas para que manejen los residuos hospitalarios de manera adecuada he encontrado en basureros agujas y bolsas de transfusión de sangre; también se han encontrado residuos anatómicos de operaciones. Hay mucho desorden
.
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