El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que su Gobierno tiene como asignatura pendiente limpiar de corrupción las aduanas del país, por lo que se harán cambios en las siguientes semanas.
“El problema de las aduanas es corrupción como en muchos otros casos, estoy satisfecho con el equipo que me apoya en materia de seguridad por su honestidad, nada que ver con lo que sucedía.
Ya es del dominio público sería de mal gusto repetirlo, pero es fundamental para llevar a cabo un cambio, una transformación: la honestidad poner por delante la honestidad. Entonces lo de aduanas es una asignatura pendiente, no hemos podido limpiar”, señaló.
La conferencia matutina señaló que el problema de las aduanas es igual de grave que la situación de los homicidios dolosos, y que es una herencia de las administraciones anteriores.
“En el caso de las aduanas viene una limpia porque se han hecho intentos, el hasta ahora director de aduanas una gente íntegra, honesta, pero es un monstruo lo de aduana de 100 cabezas, que la aduana de Manzanillo, que la aduana de Lázaro Cárdenas, que la aduana de Tijuana.
Si les contara, algún día voy a hacer, ahora no, más adelante, este todo lo que sucede, porque se fueron haciendo costumbre estos actos de inmoralidad, se fue haciendo costumbre el influyentismo, pero lleva mucho tiempo”, adelantó.