Lopez Obrador destacó que lo importante es informar si existe esto, porque quien va a resolver si hay delito es el juez, en una primera instancia, el ministerio público, “ese es el procedimiento, eso es lo que estamos”.
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CIUDAD DE MÉXICO (apro).-El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que la investigación en la Fiscalía General de la República (FGR), contra Enrique Peña Nieto por presuntas operaciones con recursos de procedencia ilícita, no es para acusarlo, todavía, de lavado de dinero, porque su gobierno no va a fabricar delitos.
“No es para salir a decir se acusa al expresidente Peña de lavado de dinero, no, se tiene información de operaciones que llevo a cabo por 26 millones de pesos que recibió del ´19 a la fecha de manera directa y eso requirió una investigación sobre el origen de eso dinero”, dijo.
Luego de la presentación de la Unidad de Inteligencia Financiera de los movimientos del exmandatario priista, el presidente pidió actuar con responsabilidad, “para no hacer juicios sumarios y al mismo tiempo actuemos con transparencia. Es una línea muy delgada, pero se puede, si asumimos nuestra responsabilidad”.
Sin embargo, afirmó que si hay elementos que concluyan un delito, se debe comenzar el proceso judicial.
“Yo no le voy a decir a Pablo, porque es una gente honorable, honesto, ni él me va a venir a decir, que no hagamos algo, para proteger a un político, a un compañero o familiar. Ni le voy a decir al fiscal: ´oiga no vaya a iniciar proceso en contra de esta persona´, cuando yo le diga eso al fiscal ya no tengo autoridad, ya el que tendría, si no más autoridad, más dominio en el gobierno, sería el fiscal y así pasaba”, sentenció.
El presidente aclaró: “Que quede de manifiesto que nosotros no vamos a fabricar delitos a nadie, se acuerdan que siempre hemos hablando de cómo antes, cuando imperaba la corrupción, se apostaba a lo espectacular”.
Insistió que su gobierno no le apuesta al circo, porque “no queremos quedarnos empantanados en el escándalo. No, nos importa acabar con la corrupción y la impunidad” –¿Contra Peña?, se le preguntó. –Claro, respondió el presidente- “no proteger a nadie”.
Recordó que en el sexenio de Carlos Salinas se tenían prácticas espectaculares: “Cuando un dirigente petrolero fue a la cárcel y a un banquero ¿y cómo terminó el gobierno de Salinas? Pues entregando los bienes de la nación a particulares, en unos casos a sus allegados”.
El presidente dijo que este tipo de investigaciones tienen que ser aceptadas por los funcionarios. “Lo tengo que aceptar en mí persona y los que estamos aquí, somos políticamente expuestos, todos”, afirmó el presidente.
Señaló que “la instrucción que tiene como titular de la Unidad de Inteligencia Financiera es que toda información vinculada con personas políticamente expuestas debe ser analizadas y de inmediato entregadas a la Fiscalía. La instrucción es no quedarnos con nada”.
El que resolverá si Peña Nieto cometió un delito es un juez, en primera instancia el Ministerio Público.