El antes bullicioso pueblo turístico enfrenta una marcada ola de violencia relacionada al narco y tráfico de personas
infobae.com
El estado de Baja California no logra limpiarse la cara de la violencia que dejó el narcotráfico. Pese a la apertura de fiscalías especializadas, el gobierno aún no ha sido capaz de poner freno a la crueldad de los asesinatos, levantones y extorsiones.
Según el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal A.C., el reacomodo y la disputa de los cárteles por las zonas del estado, trajeron al municipio Playas de Rosarito, Baja California, al primer lugar del listado de los sitios más violentos de México.
El estudio del 2019 detalla que los incidentes sangrientos han creado una imagen negativa de la joya turística, que tiene una población de más de 70,000 personas.
Para llegar a Playas de Rosarito, la mayoría de los turistas viajan en auto en carreteras con vistas impresionantes del océano turquesa y acantilados escapados. Para muchos, este municipio es mucho más interesante y refinado que Tijuana, por lo que durante las vacaciones llegan una gran cantidad de jóvenes estadounidenses atraídos por los buenos mariscos y la animada vida nocturna.
Sin embargo, los expertos coinciden que las noticias negativas sobre la situación de violencia disuaden a los turistas de ir hacia el sur de Baja California. Entre los incidentes que han causado más miedo a los surcalifornianos ha sido el multihomicidio en el Callejón Manuel M. Ponce, donde en una vivienda fueron asesinadas seis personas.
Días antes, en la ciudad ocurrió una agresión armada en contra de agentes policíacos. El ataque comenzó, luego de que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Municipio atendieran un reporte de la privación ilegal de la libertad de una persona.
En el pueblo turístico de Rosarito, se ha identificado la presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación, Sinaloa, Tijuana, y Santa Rosa de Lima. Dichas organizaciones criminales han encontrado especial interés en la región debido a la red de tráfico de drogas y personas.
Además, desde hace años se tiene la sospecha de que en Playas de Rosarito, un grupo de criminales rusos podría estar detrás de una serie de delitos en la entidad. Todo inició desde 2017, cuando las autoridades locales llevaron a cabo la detención de dos hombres de origen ruso, que en Estados Unidos contaban con antecedentes penales implicados con narcomenudeo. A raíz de esa captura, se tuvo la información de más personas rusas implicadas no sólo en el tráfico de drogas, sino también en el de personas.
En Baja California, la llegada de los hermanos Arzate, supuso un cambio radical en el negocio ilegal del narco. Los Arzate, de la mano de Ismael “El Mayo” Zambada, dirigen el tráfico de drogas en la frontera norte de Baja California. Además, son los encargados de defender la plaza con asesinatos y secuestros en contra del Cartel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Tijuana.
Municipios asolados por la violencia
Playas de Rosarito, Mananillo y Tijuana, fueron los municipios más violentos durante el 2019, según el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.
El informe presentado el lunes, advirtió que Salamanca y Tecomán completan la lista del top cinco de ciudades violentas. Los puntajes se obtienen a través de una metodología que contempla delitos como homicidio, secuestros, lesiones dolosas y extorsión.
Según el Índice nacional de violencia, Playas de Rosarito (Baja California) obtuvo 104 puntos; Manzanillo (Colima) 87; Tijuana (Baja California)86; Salamanca (Guanajuato) 82 y Tecomán (Colima) 69 puntos. Por debajo de estas regiones se encuentran Zihuatanejo, Ciudad Juárez, Celaya, Acámbaro, Uruapan, Solidaridad, Centro (Villahermosa), Valle de Santiago, Silao, Tecate, Salvatierra, Irapuato, Zamora.