*El caso de una niña de tercer grado de primaria, quien al ser golpeada con…
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CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- El caso de una niña de tercer grado de primaria, quien al ser golpeada con una mochila dentro del salón perdió la vista en un ojo, derivó en una recomendación hacia el gobernador de Tabasco, Arturo Núñez, por parte de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
La recomendación, identificada con el folio 55/2017, fue ante el incumplimiento de la Secretaría de Educación local por no acatar las observaciones que le dirigió el ómbudsman estatal.
La Secretaría sólo cumplió con una disculpa pública, por lo que la madre de la estudiante interpuso un recurso de impugnación ante la CNDH.
En la queja original se tuvo conocimiento y se acreditó que en el momento en que la maestra del tercer grado de esa escuela primaria, ubicada en el municipio de Centro, se ausentó del salón de clases y los alumnos quedaron sin supervisión.
En ese momento, la alumna, que entonces contaba con 9 años de edad, recibió un golpe con una mochila en el ojo derecho, en el cual tenía implantada una lente intraocular, lo que ocasionó se luxara y provocara el desprendimiento de su retina; como consecuencia, se le deformó el globo ocular y, posteriormente, perdió la función visual de ese ojo.
Ante el caso, el ómbudsman local determinó en su recomendación que la profesora, quien también fungía como directora interina del plantel, incurrió en prestación indebida del servicio de educación, por la omisión, descuido y negligencia.
Por ello, constató la violación de los derechos humanos a la seguridad jurídica en la administración pública, a la integridad y seguridad personal y a la educación en agravio de la niña.
No obstante, la CNDH solicitó al gobierno de Arturo Núñez reparar integralmente el daño ocasionado a la alumna, otorgándole compensación económica, e inscribir a la afectada y a su madre en el Registro Estatal de Víctimas de Tabasco.
Además restituir o reembolsar los gastos realizados por la progenitora con motivo de las atenciones médicas y psicológicas de su hija, incluyendo gastos hospitalarios, traslados y, en general, todos aquellos derivados del accidente que sufrió.
La Comisión pidió proporcionar a la agraviada la atención y tratamientos médicos y psicológicos necesarios hasta su máxima recuperación, incluyendo cirugías, prótesis y todos aquellos accesorios que sean necesarios; otorgarle las becas y apoyos que garanticen la exención de todo tipo de costos académicos en las instituciones públicas o privadas, por lo menos hasta la conclusión de su educación media superior, así como se reembolsen a su madre los gastos comprobables que haya erogado por tal motivo.
También impartir cursos de capacitación profesional en la escuela primaria en los temas: “Aspectos Básicos de los Derechos Humanos”; Derechos Humanos de los Niños”; “Ética y el Buen Servicio Público”; “Derecho a la Integridad y Seguridad Personal” y “Derecho Humano a la Igualdad y Trato Digno”, así como incorporar copia de esta Recomendación al expediente personal de la maestra responsable de lo acontecido, para dejar constancia de los hechos violatorios de derechos humanos en que incurrió.
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