*En el primer bimestre de 2017, el número de créditos hipotecarios cayó un 10%, al sumar 83 mil 732, un nivel similar al observado en el segundo mes de 2014, cuando el sector estaba en crisis….
elfinanciero.com.mx
Hace menos de un mes el Banco de México (Banxico) subió 25 puntos base la tasa de referencia para llevarla a 6.50 por ciento. Con ello, acumuló un alza de 350 puntos base desde diciembre de 2015 y alcanzó un nivel no visto desde 2009. Esto ha encarecido el financiamiento para la vivienda y en consecuencia, disminuido la demanda de préstamos para adquirir inmuebles.
Datos de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) revelan que en el primer bimestre de 2017 se registró una caída de casi 10 por ciento en el número de créditos hipotecarios, respecto al mismo periodo de 2016, al sumar 83 mil 732.
Se trata de un nivel similar al observado en el segundo mes de 2014, cuando el sector estaba en crisis.
Para los expertos, factores como el alza de tasas por parte de Banxico, el encarecimiento de materiales de construcción y la incertidumbre económica, son los causantes de la caída en el interés de la gente por adquirir compromisos a largo plazo.
“A partir de que se están anunciando incrementos en la tasa de inflación e interés vemos alejada la posibilidad de que el mercado de vivienda repunte, el asunto es básicamente el entorno no sólo de nuestro país sino también el externo, pues en Estados Unidos la FED (Banco de la Reserva Federal) anunció subidas en las tasas, entonces en ambos lados (México y Estados Unidos) están aumentando las tasas y esto repercute (en los créditos hipotecarios)”, comentó Jorge Paredes, director de la firma de corretaje Realty World.
El promedio de las tasas de interés hipotecarias llegó en marzo de 2017 (dato más reciente) a 11 por ciento, un alza de más de 90 puntos base respecto a septiembre pasado cuando tocó su mínimo histórico, según cifras del Banxico.
En monto, aunque el financiamiento total (incluido el de la banca, Infonavit y Fovissste) aumentó 5 por ciento a febrero de 2017, estuvo por debajo de la tasa de crecimiento de 8 por ciento que promedió en los últimos cuatro años.
Además, el Gobierno federal anunció para este año un recorte de 32 por ciento en los subsidios a la vivienda.
“Los subsidios juegan como un detonador importante en el segmento de interés social para tomar la decisión de adquirir una nueva vivienda, así que dado que hubo una contracción del gasto público y con ello en los subsidios, se tuvo un impacto directo sobre una menor demanda de vivienda”, consideró Leonardo González, analista de Propiedades.com.
La menor demanda de financiamiento ya se refleja en una contracción de la venta de vivienda. En enero de 2017, último dato disponible, el volumen de casas y departamentos comercializados en el país cayó casi 18 por ciento, respecto al mismo mes de 2016.
Según Paredes, para este año se espera una contracción de hasta 8 por ciento en la venta de vivienda nueva, en línea con lo observado durante 2016 cuando se tuvo la primera baja en al menos tres años.
Analistas consideraron que pese a los esfuerzos de instituciones como el Infonavit, que recientemente elevó en 70 por ciento los topes máximos a los créditos hipotecarios y anunció que mantendría sus tasas de interés en 12 por ciento fijo anual, el mercado mantendrá una posición precavida para la adquisición de nuevos inmuebles.
“Estas acciones pueden ayudar a amortiguar y tratar de impulsar un poco el decremento que se ha evidenciado a partir del año pasado en lo que es la producción y colocación de vivienda, sin embargo dada la situación que estamos viviendo, estos esfuerzos del Gobierno no ayudan a levantar la industria, que anda un poco lenta”, dijo Paredes.
Sumado a lo anterior, al cierre de marzo de 2017 los precios de la construcción residencial subieron 13.7 por ciento, la mayor alza en siete años, principalmente por el encarecimiento del acero, combustibles y la volatilidad en el tipo de cambio, según la CMIC.
Para el presente año la SHF prevé una caída de casi 7 por ciento en la demanda de créditos hipotecarios, lo que representaría un nivel cercano al de 2012.