Hoy en día, las gorditas representan no solo la tradición e historia, sino también la diversidad de la gastronomía mexicana
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Desde tiempos prehispánicos, las gorditas de chicharrón han sido un manjar arraigado en la gastronomía mexicana, cuya historia se remonta a las civilizaciones indígenas como los aztecas y los mayas.
En aquellos tiempos, el maíz constituía la base fundamental de su alimentación, y elaboraban tortillas de maíz gruesas, precursoras de las gorditas actuales, las cuales rellenaban con una variedad de ingredientes.
El término “gordita” en México se refiere a una tortilla de maíz más gruesa de lo habitual, utilizado para describir diferentes tipos de tortillas en diversas regiones de la República.
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Con la llegada de los españoles y la consecuente mezcla de culturas, las técnicas y sabores de este platillo evolucionaron, incorporando nuevos ingredientes y variaciones regionales.
Gorditas y antojitos “nacionales”
Hoy en día, las gorditas representan no solo la tradición e historia, sino también la diversidad de la gastronomía mexicana. Se han convertido en un referente culinario, por lo cual es común que se encuentre variando su receta y preparación según la región del país en que se encuentren.
Entre las variedades más destacadas se encuentran las que se venden en la Villa de Guadalupe de la Ciudad de México, en algunas fiestas populares o en barrios de la ciudad de México.
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Son pequeñas, hechas de maíz, ligerame
nte endulzadas y cocidas en comal, que se consumen como postre. Por otro lado, hacia el norte del país, en lugares como Aguascalientes, Durango y Ciudad Victoria, Tamaulipas, se encuentran las gorditas más conocidas.
Son tortillas de tamaño normal, particularmente gruesas, que se abren con cuidado para rellenarlas de distintos guisados como chicharrón en salsa verde o roja, picadillo, papa con chorizo, requesón y otros.
En Ciudad Victoria, destaca un establecimiento llamado “Doña Tota”, el cual tiene más de 70 años de historia y continúa operando bajo la administración de la familia de Doña Tota.
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La popularidad de este negocio ha llevado a su expansión, convirtiéndose en una cadena con presencia en más de sesenta ciudades mexicanas y una sucursal en Los Ángeles, California. Una de las particularidades de las gorditas de este lugar es que, además de las tradicionales de maíz, ofrecen una versión con tortilla de harina.
La receta “especial”
Aunque es posible que el origen de este platillo se remonte al estado de Veracruz, debido a la amplia diversidad de gorditas que existen en todo el país, su procedencia exacta no está clara.
Sin importar su lugar de origen, las gorditas de chicharrón son un verdadero tesoro de la cocina mexicana, un platillo que ha resistido el paso del tiempo y que continúa deleitando paladares en todo el país y más allá de sus fronteras.
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La receta original de las gorditas varía dependiendo de la región de México, pero generalmente incluye ingredientes como masa para tortillas, papa cocida, harina, polvo para hornear y sal.
Su preparación implica mezclar la masa con los demás ingredientes, formar bolitas del tamaño de una nuez y aplanarlas para formar tortillas no muy delgadas.Las gorditas se fríen en aceite caliente hasta que estén doradas y esponjosas, se retiran y se colocan sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.Para servirlas, las gorditas se presentan en una canasta forrada con una servilleta bordada y se acompañan con salsa al gusto.
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Es importante mencionar que esta es una receta básica y que las gorditas pueden ser rellenadas con una variedad de ingredientes, como chicharrón, frijoles, queso, champiñones, acompañas, eso sí, con salsa o guacamole.