“Layín” saltó a la fama cuando reconoció que había tomado dinero de las arcas de San Blas, municipio que gobernó en dos ocasiones
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Hilario Ramírez Villanueva “Layín”, exalcalde de San Blas, Nayarit, recibió una sentencia de dos años de prisión y el pago de una multa por la venta de la aeropista del puerto dicho municipio. La Fiscalía del estado concluyó tras una indagatoria que el dinero de esa transacción jamás ingresó a las arcas del gobierno que comandó entre 2008 y 2011 y de 2014 a 2017.
La Auditoría Superior de Nayarit (ASEN) denunció penalmente a Ramírez Villanueva -consta en el expediente 672/2018- por la venta irregular, el 29 de agosto de 2016, de las cinco hectáreas que ocupaba el antiguo aeropuerto de San Blas, en 12 millones 415 mil pesos, pero el dinero no ingresó al ayuntamiento y se sabe que el valor catastral del terreno era de 36 millones de pesos.
En diciembre de 2019 fue girada una orden de aprehensión por los delitos de ejercicio indebido de funciones, cohecho, abuso de autoridad y daño a la hacienda pública, sin embargo, “Layín” no se presentó a las audiencias de enero de 2020, por lo que las autoridades de Nayarit comenzaron a considerarlo ya un prófugo de la justicia y se giraron solicitudes de colaboración para detenerlo en cualquier parte del país.
Además, también lo volvieron famoso sus controvertidos festejos en los que invitaba a cientos de personas a “un ruidito y un taquito”, los cuales eran amenizados por agrupaciones como Los Tigres del Norte, La Reina del Sur y otras bandas; además de que en 2016 le regaló un coche a Rubí, la quinceañera más conocida de San Luis Potosí, y por levantarle la falda a una mujer mientras bailaba con ella, en uno de sus cumpleaños.