Según el fiscal de Colima, los detenidos pasaban información al cártel criminal, manipulaban las cámaras del municipio de Colima, y hacían reportes falsos.
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Mediante un operativo conjunto, corporaciones estatales y federales aprehendieron en Colima a ocho policías municipales en activo, entre quienes se encuentra una mujer, bajo la acusación de filtrar información al Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), informó la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de Paz y Seguridad del Estado.
Siete de los elementos detenidos se desempeñaban como agentes de la Dirección de Seguridad Pública de la capital del estado, mientras que el restante era miembro del grupo de escoltas de seguridad de la presidenta municipal de Villa de Álvarez, Esther Gutiérrez Andrade, dio a conocer el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Bryant Alejandro García Ramírez.
En declaraciones a los medios de comunicación, el funcionario señaló que desde hace seis meses había sido empezada la investigación del caso y, a partir de ciertos datos de prueba obtenidos a través de inteligencia, se abrió una carpeta de investigación por el uso indebido de información de actividades de seguridad pública, de procuración e impartición de justicia y del sistema penitenciario, así como asociación delictuosa.
“Se recabaron los datos de prueba necesarios —añadió— y cuando por fin ya teníamos la identidad de las personas solicitamos la orden de aprehensión y obviamente fue concedida y ya fue ejecutada”.
García Ramírez dijo que mientras corre el plazo para que el juez determine la situación jurídica de los detenidos, la FGE dará vista del caso a la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), dependiente de la Fiscalía General de la República para que les sigan también el proceso por delincuencia organizada.
El fiscal de Colima dijo que “el grupo delictivo al cual pudimos identificar que estaban vinculados (los policías detenidos) es al Cártel Jalisco Nueva Generación y obviamente es el uso de la información que ellos realizaban: pasaban información, algunos de ellos manipulaban las cámaras (del municipio de Colima), hacían reportes falsos o si iba a haber detenidos ellos iban y decían que ellos no eran para que los dejaran ir”.
En suma, agregó Bryant Alejandro García, era “un conglomerado de actividades delictivas las que realizaban estas personas y que obviamente van a ser juzgadas por esos actos, y estaremos a la espera de la vinculación a proceso, de lo que resuelva el juez en las próximas horas”.
De acuerdo con la Mesa Estatal de Paz y Seguridad, la detención de los ocho policías se logró luego de labores de investigación, inteligencia y coordinación entre la FGE e instituciones como la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del Gobierno del Estado de Colima, el Centro de Coordinación, Control, Comando, Comunicación, Cómputo e Inteligencia (C5i), la Secretaría de Marina (Semar), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional (GN) y la Fiscalía General de la República (FGR).
La detención se llevó a cabo la mañana de este jueves alrededor de las 06:30 horas en cumplimento de órdenes de aprehensión que había en contra de estos elementos, en donde 5 de ellos fueron aprehendidos en la Dirección de la Policía Municipal de Colima; 2 en las inmediaciones de sus domicilios y 1 en la Dirección de la Policía Municipal de Villa de Álvarez.
Por su parte, la Policía Municipal de Colima emitió un comunicado en el que ofreció su colaboración con las autoridades responsables de investigar a los elementos detenidos, bajo el argumento de que “desde el inicio de la administración municipal ha existido plena disposición a la coordinación con todas las corporaciones de seguridad y fuerzas armadas”.
Manifestó que la seguridad de los ciudadanos “es nuestra máxima prioridad y habrá cero tolerancia hacia cualquier conducta delictiva en la que pueda estar implicado alguno de nuestros agentes”.
Sin embargo, la corporación municipal lamentó también que “en este operativo no existiera coordinación por parte de la Fiscalía General del Estado con ninguna autoridad municipal, pues la forma en que se realizó generó tensión entre las corporaciones e incluso en algún momento se puso en riesgo la integridad de las personas, lo que resulta inadmisible”.