*Para trascender la prédica sobre las bondades del libre mercado y la globalización, el presidente Enrique Peña Nieto atestiguó…
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Hangzhou, China
Para trascender la prédica sobre las bondades del libre mercado y la globalización, el presidente Enrique Peña Nieto atestiguó la firma entre el gobierno mexicano y Alibaba, el gigante asiático de comercio vía Internet.
La compañía de Jack Ma tiene un valor en el mercado de 242 mil millones de dólares y genera operaciones entre sus usuarios por más de 500 mil millones de dólares.
Ese volumen de transacciones, explicó Peña, es apenas un poco menos del comercio total entre México y Estados Unidos: casi de esa dimensión son las ventas que se realizan mediante la plataforma de Jack Ma
, dijo.
Se trata también de que la globalización no sólo beneficie a las grandes firmas, señaló, y refrendó su compromiso de impulsar la apertura comercial, la inclusión e incorporación de empresas de todos tamaños en los distintos mercados
.
El acuerdo aquí firmado se hizo para promover las ventas vía Internet de compañías mexicanas, sobre todo pequeñas y medianas (pymes), mediante el uso de la plataforma B2B de alibaba.com y compartir la experiencia de la operación de las de logística y de pago para mejorar las capacidades de comercio electrónico transfronterizo, así como atraer turismo chino a México.
Apenas en mayo pasado Jack Ma estuvo en México, y hoy fue anfitrión en sus oficinas centrales del presidente Peña y su comitiva, en la última actividad que tuvo en China, adonde vino centralmente a participar como invitado a la novena cumbre de los Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).
Las instalaciones de Alibaba Group son enormes. En uno de sus edificios hay una especie de museo donde con gráficas y animaciones se ilustra lo mismo sobre su sistema de ventas y conexión entre productores, que se presentan sofisticados avances tecnológicos. Hoy fue el caso con una computadora Genius, la cual respondió a la instrucción de reproducir la música más popular de México y dio el nombre de su presidente, por citar sólo los ejemplos solicitados.
Mientras, por las avenidas y oficinas de Alibaba caminan o van en bicicleta, despreocupados y sin cumplir exigencia alguna de arreglo o apariencia, decenas de jóvenes –no sólo chinos– graduados de diversas especialidades y con amplio dominio de idiomas para moverse en el mundo de las ventas en línea.
Entusiasmado con el proyecto de capacitar emprendedores mexicanos, mejorar la logística para su comercio electrónico, entre otros objetivos, Peña narraba lo asombroso de que hace cerca de 18 años, 18 amigos hayan iniciado Alibaba en un garaje y hoy realice 120 mil transacciones monetarias por segundo y permita generar más de 30 millones empleos directos e indirectos en distintas partes del mundo.
“Sin duda, la globalización y la tecnología digital van a transformar la manera en que hoy hacemos las cosas’’, dijo. Tampoco ahorró elogios para el empresario chino, quien “se ha convertido en una figura con gran reconocimiento y prestigio internacional’’.
A su vez, Jack Ma, uno de los hombres más ricos del mundo, expuso que en años recientes, la globalización del comercio y sus reglas se han diseñado para empresas grandes.
En el futuro, apuntó, todas las pymes se deben globalizar, “ya no habrá algo hecho en China, en Estados Unidos o en México. Todo será hecho en Internet… debemos pensar globalmente”.
Y aconsejó a México: no sólo se trata de exportar a Estados Unidos, exporten a China, que en los próximos 15 años tendrá unos 500 millones de consumidores de la clase media.
El Presidente regresó ayer por la tarde a Ciudad de México.