Fiscalía de Veracruz entrega cuerpo de joven desaparecida… cinco años después

*El cuerpo de Manciny “N”, joven de 32 años, fue entregado este fin de semana a sus…

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XALAPA, Ver. (apro).- El cuerpo de Manciny “N”, joven de 32 años, fue entregado este fin de semana a sus familiares, tras poco más de cinco años de que fue reportada como “desaparecida”, informaron empleados de la Fiscalía General del Estado (FGE).

La joven salió de Xalapa -donde trabajaba- hacia Cosautlán de Carvajal el 12 de enero del 2012. Se fue sin dejar rastro. La única pista que tenían sus familiares es que era “acosada” por integrantes de la delincuencia organizada que operaba en la región que, presuntamente, dominaba “Los Zetas”.

Apenas este fin de semana, sus familiares supieron que una semana después de que se reportó su desaparición, su cuerpo fue encontrado en la carretera que conduce a Agua Bendita, en el municipio de Xico. Su cuerpo presentaba huellas de golpes. Peritos forenses de aquella época determinaron que murió estrangulada.

Al no ser identificado, su cuerpo fue depositado en la fosa común del panteón municipal desde finales de enero del 2012. Fue la Procuraduría General de la República (PGR) y la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO),​ quienes determinaron que ese cuerpo se encontraba como “No Identificado” en dicho panteón veracruzano.

El Colectivo Familias Enlaces Xalapa siguió las pistas de los cuerpos depositados en la fosa común, tras una búsqueda de 13 jovencitas desaparecidas en noviembre del 2011 en Xalapa, quienes, a la fecha ni la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), la FGE ni la PGR han podido dar con su paradero.

Sin embargo, dicha organización de familiares de personas desaparecidas logró cotejar el ADN de Manciny con el de su familia y éste dio positivo.

Tras la desaparición de Manciny, su familia decidió huir de la entidad ante la grave inseguridad que priva en municipios como Cosautlán de Carvajal, Xico, Teocelo, Naolinco, Coatepec y zonas aledañas.

Empleados de la Dirección de Servicios Periciales y de la FGE dieron a conocer del caso de Manciny a apro y, de paso, señalaron que en el llamado “narcocementerio” de Colinas de Santa Fe -el cual también era utilizado por elementos de la Policía Intermunicipal Veracruz-Boca del Río para desaparecer cuerpos- han continuado con la entrega de apenas tres cuerpos.

Cifras negras

Cifras de la Fiscalía veracruzana entregadas a esta agencia vía solicitudes de transparencia dan cuenta de la desaparición de dos mil 400 personas durante el sexenio de Javier Duarte de Ochoa.

En la administración de procuración de justicia de ese gobierno, el entonces titular de la FGE, Luis Ángel Bravo Contreras, apenas reconoció la desaparición de 950 personas, de las cuales 110 fueron localizados sin vida.

En Veracruz, cifras de la Fiscalía dan cuenta de que hay 300 cuerpos almacenados en diversas planchas del forense de la entidad que no han podido ser identificados.

Una radiografía de inhumaciones ilícitas en Veracruz durante el sexenio de Duarte de Ochoa, -preso en el reclusorio norte desde hace dos semanas-, ilustra que en 43 ciudades de la entidad se detectaron fosas clandestinas.

El mapeo de dichos lugares devela que el crimen organizado tenía cementerios clandestinos en todas las regiones de Veracruz, el Totonacapan, la Huasteca, los Tuxtlas, la región Olmeca y las periferias de las grandes ciudades.

El listado detalla las siguientes ciudades: Pueblo Viejo, Veracruz, Oluta, Ixmatlahuacan, Perote, Misantla, Teocelo, Coatepec, Emiliano Zapata, Tuxpan, Papantla, Acayucan, Jáltipan, Nanchital, Chinameca, Cosoleacaque, Minatitlán, Coatzacoalcos, Agua Dulce, Lerdo de Tejada, Rodríguez Clara, Isla, Alto Lucero.

Además, en Alvarado, Chontla, Moloacán, Oteapan, Tres Valles, Carlos A. Carrillo, Tihuatlán, Las Choapas, Soconusco, Mecayapan, Chicalpextle, Cosamaloapan, Chacaltianguis, Castillo de Teayo, Tampico Alto, Texistepec, Tlacotalpan, Ixtaczoquitlán, Córdoba y San Rafael.

En el sexenio de Javier Duarte, Proceso logró documentar 20 cementerios clandestinos de norte a sur de Veracruz, de los cuales, la extinta Procuraduría General de Justicia (PGJ), la Fiscalía, la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) y el propio gobernador expriista únicamente admitieron la exhumación de la mitad.

Colectivos como Familias Enlaces Xalapa y Solecito han acusado negligencias y omisiones de las autoridades de Veracruz, sobre todo en el manejo irregular de cuerpos No Identificados (NI) arrojados a la fosa común en diversos panteones de la entidad.

En Xalapa, en el panteón Palo Verde, colectivos de desaparecidos han dado a conocer que hubo irregularidades en el manejo de 195. En Veracruz hay un asentamiento sólido de organizaciones criminales como Cártel de Jalisco Nueva Generación (2011) y su posterior asociación con otras células criminales como Cártel de Sinaloa y Antrax (2015), así como Los Zetas.