proceso.com.mx
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Las denuncias sobre Naasón Joaquín García no eran conocidas por la administración de Andrés Manuel López Obrador, quien dijo tener “la conciencia tranquila” respecto al escándalo del líder religioso de la Luz del Mundo.
López Obrador consideró que la detención de Naasón García no afecta a su gobierno, aunque anticipó que sus críticos pueden usar el episodio del Palacio de Bellas Artes para querer afectarlo:
“Pero ni modo que nos preocupemos por eso, vean las columnas nos están cuestionando, está de moda, ya se está volviendo deporte nacional, pero no pasa nada”, dijo.
Prácticamente, el mandatario afirmó desconocer lo que había ocurrido en Bellas Artes –“se está deliberando”—en relación al uso del inmueble para un homenaje al líder religioso, que al parecer no se llevó a cabo.
Al respecto, se reivindicó partidario de la tolerancia y el respeto, para luego referir que en 1954, en los funerales de Frida Kahlo, en Bellas Artes, le colocaron al féretro una bandera del Partido Comunista y por ese hecho, despidieron al director, Andrés Iriarte.
Ayer, en California, Estados Unidos, Naasón Joaquín García fue detenido junto con dos personas más, acusado de los delitos de violación, tráfico sexual y pornografía infantil, luego de que hace dos semanas, el Palacio de Bellas Artes fuera empleado para presentar una ópera y donde, como parte del evento, se pretendía rendirle un homenaje al sacerdote de la Luz del Mundo, una iglesia trasnacional nacida en Jalisco, que se supone tiene alrededor de 5 millones de miembros.