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CIUDAD DE MÉXICO.
El fenómeno del desplazamiento forzado por crimen organizado, conflictos políticos o sociales mantiene fuera de sus comunidades de origen a más de 380 mil mexicanos, según algunos organismos, aunque la cifra negra pudiera llegar hasta los 8 millones, que enfrentan olvido, inseguridad y pobreza, alertó la directora del Observatorio de Desplazamiento Interno, Alexandra Bilak durante su informe dado a conocer este jueves, en el que incluye algunas recomendaciones al estado mexicano.
En la sede de la Secretaría de Gobernación, la funcionaria que ayer recorrió un campamento de desplazados en Chiapas, señaló que lo que observó en nuestro país fue consistente con los reportes que ya han sido publicados y con lo que se ha platicado con diferentes grupos de defensa de derechos humanos.
En el caso del Gobierno mexicano tiene que establecer ciertos principios básicos y uno de estos principios básicos será decidir cómo se va a enmarcar esta situación, si se va a ver desde un nivel de complejidad de forma general, en el caso de las desplazadas internamente, si va a ser una cuestión de violencia o por ejemplo, son actividades perpetradas por este grupo de paramilitares, cuestiones políticas, cuestiones ambientales”, comentó.
Alexandra Bilak sugirió fortalecer la labor de atención a desplazados a partir de una normatividad acorde a cada uno de los casos y con la creación de un fondo económico que permita atender a todas las víctimas de este fenómeno.
Subrayó que a la par del problema de desplazados, México tiene el reto de resolver el fenómeno migratorio y de refugiados.
México tiene recursos limitados y necesita todo el apoyo que pueda solicitar para poder responder a las necesidades de los migrantes y refugiados junto con el apoyo internacional por lo que exhorto a México a unir el desplazamiento interno a la cartera de migración”.
En tanto, el coordinador de la Comisión Mexicana de Atención al Refugiado, Andrés Ramírez Silva, informó que existe una iniciativa de ley para darle mayores atribuciones a este organismo y atender lo mismo a refugiados que a desplazados, cuyo fenómeno fue relegado en su atención en la última década
Ya basta, tenemos que tomar con seriedad un tema de gran importancia que es también el desplazamiento forzado, pero con la diferencia de que es el desplazamiento forzado de los mexicanos cuyo problema data de ya muchos años. “Es realmente una vergüenza, entonces yo creo que es una vergüenza y tenemos que tomarlo con seriedad.”
En el tema del presupuesto, adelantó, la nueva estructura para atender solo el caso de desplazamiento interno, requerirá contar con mayores recursos económicos.
Ahora, desde luego que para esto no quede en letra muerta se requiere que esos fondos estén disponibles, justamente un problema preocupante que vimos el día de ayer en la reunión con el gobierno de Chiapas es que están avanzando en el tema del reglamento y las victimas, pero tienen la limitante muy grande de los recursos y el fondo que plantean ellos es inexistente”, reconoció.