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Ciudad de México. La crueldad animal cobró una nueva víctima: Génesis, una perrita de un año, cuya tráquea fue perforada, presentaba una grave laceración en el cuello al estar atada con una soga a una construcción y una severa desnutrición que le impedía mantenerse en pie.
Tras ser rescatada en Tulcingo del Valle, en Puebla, este mes, es trasladada al refugio Fundación el Miau y el Guau y, posteriormente, al Hospital Veterinario Frecuencia Animal, ubicado en Iztapalapa, donde es recibida.
El doctor Wenceslao Tovar Álvarez, dueño del nosocomio, informó que su estado de salud era crítico, siendo la desnutrición el factor más delicado, por lo que temía no soportara la anestesia, pero se le hicieron los estudios correspondientes y entró a cirugía.
La perrita, sin embargo, “murió durante el intervalo de un minuto y medio, pero logramos regresarla a la vida”, procediendo a suturar el 90 por ciento de la herida, dejando sólo un orificio para que pudiera respirar.
Días después, luego de consultar con otros médicos de diversas especialidades, Génesis es nuevamente intervenida y logra sobrevivir, y se le practica una tercera cirugía. Hoy, se encuentra en recuperación, con muchas ganas de vivir, destacó.
A través de la campaña que se inició en redes sociales #JusticiaparaGénesis, explicó, se busca “se haga justicia, haya una conciencia animal por parte de la población y pedir ayuda para cuestiones legales y económica, para su comida, medicinas y atención médica”.
Se prevé además realizar “una fiesta con algún grupo de rock para juntar dinero, porque los gastos nos han sobrepasado, pues llevamos la cuenta al día y he invertido, a precio médico, más de 14 mil pesos, no me duelen, pero estaría bien que la persona que causo este daño a la perrita, lo pagara”, consideró.
Aparte estamos pidiendo una recaudación de alimento, dinero y medicinas para ayudarla, porque “seguirá necesitando medicamento toda su vida, al dañarse su corazón, por lo cual requiere alimento especial, tomar medicina diaria y exámenes cada seis meses”, indicó.
Génesis, estimó, “vivirá poco menos de lo normal, pues se está enfermando desde su primer año de edad, pero queremos cuidarla, tanto la Fundación, que dirige Manuel Lisbona, donde podría quedarse, como yo, y si contamos con el apoyo de la gente, que mejor”.
La Fundación el Miau y el Guau, dijo, desea que se conozca la historia de lucha y tenacidad de esta perrita por sobrevivir, así como de las personas inmiscuidas en su ayuda y salvación; y que la persona que la “llevó a ese grado de tortura y miseria, sea sancionado”.
Se trata, precisó la Fundación, de “proteger a los más vulnerables. Nuestro lema es: Ellos no tienen voz, nosotros somos su voz. Ronroneando y ladrando la vida”, por lo que, junto con ellos buscaremos sacar adelante a Génesis, puntualizó.
México ocupa el tercer lugar del mundo en casos de maltrato animal y en la capital del país a la persona que sea cruel con un animal y le cause lesiones o alteraciones a su salud, se le impondrá de uno a tres años de prisión.
De acuerdo con las más recientes reformas al código penal local pagará además una multa de 300 a 500 veces el valor diario de la Unidad de Medida de Actualización, es decir 31 mil 122 a 51 mil 870 pesos.
Las sanciones se incrementarán hasta en dos terceras partes si ponen en peligro la vida del animal o cuando le cause daño temporal o permanente.
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