*A la pequeña Andrea y a su familia los trataron como criminales, les exigieron que revelaran dónde estaba escondida la droga, mientras les aventaban el equipaje…
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JALISCO
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) investiga el presunto caso de discriminación padecido por la familia de Andrea, la niña de 12 años cantora del Coro Infantil de la Catedral de Guadalajara, el pasado martes 9 de octubre cuando intentaba arribar a Europa vía el Aeropuerto de Londres para asistir a dos presentaciones corales programadas en Italia y España.
La sección consular está en contacto con la familia y les requirió documentación para formalizar la queja. Desde el primer momento que se contactó a la embajada se prestó la atención consular a la menor y a su familia. Una vez obtenida la documentación solicitada se procederá conforme a los protocolos”, informaron fuentes diplomáticas consultadas por Excélsior.
Mientras tanto, Andrea y su familia tras su arribo a Guadalajara acudieron a la delegación de la SRE para presentar por escrito una queja por lo sucedido en la Migración de Londres, donde sostienen que fueron discriminados, humillados y deportados.
Pero se les dijo que había miles de casos similares por racismo en el Aeropuerto de Londres y que Inglaterra, como cualquier otro país del mundo, es autónoma y puede decidir libremente quién entra a su territorio y quién no.
Les recomendaron presentar en formato electrónico la información de lo sucedido para dejar un antecedente.
La familia sostiene que los agentes migratorios londinenses se burlaron de las profesiones desempeñadas por los padres de la menor y el dinero que traían (200 mil pesos), les negaron el permiso de ingreso argumentando que Londres es muy caro para ellos y les impidieron contactar a las autoridades diplomáticas mexicanas.
Los ficharon (incluyendo a la niña) y los deportaron.
Durante las ocho horas de estancia en Migración tampoco les permitieron satisfacer sus necesidades básicas como beber líquidos o ir al sanitario.
Los trataron “como criminales” al gritar y exigirles que revelaran dónde estaba escondida la droga, mientras les aventaban el equipaje.
Mientras tanto, el resto de niños del Coro Infantil de Catedral de Guadalajara se presentó en el Festival Internacional Corearte, con sede en Barcelona, España.