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Los insecticidas para el control del mosquito transmisor del dengue no se tendrán hasta el mes de junio, reconoció el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell. Sobre el incremento de 250 por ciento en los casos de la enfermedad en el primer trimestre de 2019 respecto del mismo lapso del año pasado, dijo que puede ser resultado de varios factores, entre ellos la modificación biológica del virus que provoca enfermedad con más síntomas.
El funcionario de la Secretaría de Salud (Ssa) también planteó sus dudas sobre el registro de casos porque “no hay consistencia entre lo ocurrido en el sexenio pasado –que disminuyó el número de enfermos– con los datos históricos de la infección” que hasta 2012 reflejaban una tendencia creciente, de 10 a 12 por ciento en promedio.
En entrevista, reiteró que no son comprensibles las cifras que se reportaron sobre la afectación de la epidemia de zika, que se inició en noviembre de 2015 y duró 2.5 años, pero sólo se reportaron alrededor de 18 mil casos. Es científicamente inviable y lo mismo pasó con el dengue y el chikungunya
.
Señaló que el combate del dengue es un reto global.
Sobre las medidas adoptadas durante la pasada administración para vigilar la presencia de mosquitos en las regiones de mayor riesgo, con la colocación de ovitrampas y fumigaciones en sitios específicos, así como la participación de México en investigaciones científicas que buscan reducir la población del mosquito Aedes aegypti, transmisor de dengue, zika y chikungunya, López Gatell señaló que pudieron haber contribuido
en la disminución de los casos.
También ha servido la estrategia para la eliminación de criaderos del insecto, mediante la limpieza de los patios de las casas y con fumigaciones.
No obstante, puso en duda las estadísticas que señalan la disminución del dengue en el país en los pasados seis años.
Dijo que el incremento registrado entre enero y el 15 de abril de 2019 también puede tener su origen en un fenómeno que se analiza desde hace dos años en el continente americano con apoyo de la Organización Panamericana de la Salud. Una de las hipótesis científicas aún en investigación, es que la reciente epidemia de zika pudiera haber modificado la respuesta del sistema de defensa de los seres humanos ante el virus.