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Washington.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, arremetió de nuevo contra la prensa, a la que acusó este domingo de publicar mentiras fabricadas e inventarse fuentes, tras conocerse que Jared Kushner, su yerno y asesor, trató de establecer un canal secreto de comunicaciones con Moscú antes de que el mandatario asumiera el cargo, el pasado 20 de enero.
Al regreso de su primera gira internacional, misma que calificó de jonrón, Trump escribió en Twitter: Soy de la opinión de que muchas de las filtraciones (a la prensa) que salen de la Casa Blanca son mentiras fabricadas e inventadas por los medios de comunicación falsos.
El presidente acusó a los medios de inventarse fuentes, después de que la prensa estadunidense reveló que Kushner está en el foco de la investigación de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) sobre presuntos nexos entre la campaña electoral de Trump y Moscú.
“Cuando lean las palabras ‘según fuentes’ en los medios de comunicación falsos, y no mencionen nombres, es muy posible que esas fuentes no existan sino que hayan sido inventadas por escritores de noticias falsas (#FakeNews)”, añadió en Twitter, donde reiteró que el enemigo son las (#FakeNews) noticias falsas.
El Washington Post publicó el viernes que el yerno de Trump intentó establecer un canal secreto y seguro de comunicación en diciembre entre el equipo de transición de Trump y el Kremlin, y citó fuentes anónimas.
Según siete funcionarios estadunidensese actuales y antiguos, Kushner mantuvo al menos tres contactos no revelados con Serguei Kisylak, embajador ruso en Estados Unidos, durante y después de la campaña presidencial de 2016, reportó la agencia de noticias Reuters.
Los contactos entre miembros del equipo de campaña de Trump y funcionarios rusos antes de las elecciones presidenciales del 8 de noviembre, coincidieron con lo que las agencias de inteligencia estadunidenses concluyeron que fue un esfuerzo del Kremlin –mediante la piratería informática, noticias falsas y propaganda– para aumentar las posibilidades del magnate inmobiliario de llegar a la Casa Blanca.
Los tuits de Trump se conocen en momentos en que los medios informaron que la Casa Blanca se prepara para crear un centro de crisis para combatir las crecientes dudas sobre los lazos entre Rusia y su campaña presidencial.
Según The Washington Post, Trump planea una reorganización de su equipo de comunicación. Uno de los posibles cambios es la sustitución del portavoz Sean Spicer, quien ha tenido problemas a la hora de transmitir los mensajes del magnate a la prensa y al público.
El rotativo también aseguró que el centro de crisis se instalaría siguiendo un modelo similar al que se utilizó en la Casa Blanca durante la presidencia de Bill Clinton (1993-2001) para manejar el escándalo sexual de la becaria Mónica Lewinsky.
Clinton estableció un equipo de abogados y asesores de comunicación y expertos políticos, separado de la estructura de la Casa Blanca, para manejar ese y otros asuntos delicados.
Según el diario, Trump está planeando el regreso de su controvertido ex jefe de campaña, Corey Lewandowski, a quien despidió en junio de 2016 tras su relación hostil con los medios que cubrían la campaña.
De acuerdo con CBS News, el presidente también quiere contar con los consejos del abogado neoyorquino Marc Kasowitz, abogado de confianza que actuaría como asesor externo durante la investigación del caso de los rusos.
En otro orden, algunos miembros del gobierno salieron a apoyar al jefe de la Casa Blanca, al considerar que es normal establecer canales de comunicación no oficiales con otros países, incluida Rusia.
Para mí es aceptable todo lo que se pueda hacer para comunicar a las personas, en particular con organizaciones que no son particularmente amistosas con nosotros, dijo John Kelly, secretario de Seguridad Interior.