Debido a que viajaban en estado de ebriedad y en zigzag fueron notados por las fuerzas armadas
México enfrenta una de las peores crisis migratorias de su historia, pero la llegada masiva de personas migrantes no es lo más preocupante, sino los delitos y vejaciones que ellos llegan a sufrir durante su paso por el territorio nacional. Si bien tomar la decisión de abandonar todo para buscar una vida mejor no es fácil, el camino para lograrlo lo es aún menos. Muchas veces los seres más indefensos son quienes caen en manos de personas sin escrúpulos, como le ocurrió a una niña de cinco años, quien fue violada y maltratada por dos hombres.
La menor fue rescatada en Ciudad Juárez, Chihuahua, sitio donde ocurrió una de las mayores tragedias migrantes, justo el mismo día del incendio que acabó con la vida de 40 personas indocumentadas procedentes de Centro y Sur América. Fueron Agentes Federales de Migración (AFM) y elementos de la Guardia Nacional (GN), le marcaron el alto al conductor de una camioneta que circulaba en zigzag sobre la carretera Anapra-San Jerónimo, a la altura de la Unión Ganadera.
Al detenerse el vehículo, las autoridades comenzaron a inspeccionarlo, se percataron de que tanto el conductor como el copiloto tenían aliento alcohóloco, pero vieron que en la parte trasera estaba una asustada niña, de la que ninguno de lso sujetos pudo comprobar su parentesco o vínculo, por lo que los detuvieron.
A su corta edad, la menor migrante extranjera viajaba sola, no se sabe cómo fue que los hombres la encontraron o si alguien se las encargó. Para verificar su estado de salud la niña fue llevada a la Cruz Roja, donde personal médico la revisó. La pequeña mostraba moretones y cicatrices en varias partes del cuerpo; la revisión arrojó que había sido víctima de violación, por lo que quedó bajo la custodia de la Subprocuraduría de Protección Auxiliar de Niñas, Niños y Adolescentes de la entidad.
Niños migrantes
De acuerdo con Save the Children, millones de niños y niñas se desplazan de un lugar a otro, dentro y fuera de sus fronteras, acompañados por una personas adulta, por su padre, madre o tutor. En muchos casos, los menores viajan solos, sin nadie que les proteja, siendo especialmente vulnerables frente a la explotación, el abuso o cualquiera de las distintas formas de violencia. Son niños y niñas que forman parte de un movimiento mucho mayor de población migrante que tiene lugar en todo el mundo.
Son muchas las razones -tanto voluntarias como involuntarias- por las que los niños migran, a veces que viajan a otros lugares en busca de las oportunidades que no encuentran en su propio país. Otras veces, son forzados a desplazarse bien por causas como la pobreza, la violencia o los desastres naturales o porque se convierten en víctimas de tráfico o explotación.